Estreno en España: 7 de Septiembre de 2012.

Dredd (Karl Urban) es un policía del futuro que combina los poderes de juez, jurado y ejecutor al mismo tiempo. Ejerce su poder en la mega ciudad One, que se extiende a lo largo de toda la costa este de los Estados Unidos. La ciudad, que va desde Boston a Washington DC, es una metrópolis vasta y violenta donde los criminales campan a sus anchas en sus caóticas calles. La única fuerza del orden recae sobre los policías urbanos, conocidos como “Jueces”. Dredd es el encargado de entrenar y evaluar a Cassanda Anderson (Olivia Thirlby), una novata con habilidades psíquicas gracias a una mutación genética. Deberán acudir a realizar una detención en un edificio de más de 200 pisos, controlado por Ma-Ma (Lena Headey), una ex prostituta reconvertida en capo de la droga. Cuando capturan a uno de los más allegados de Ma-Ma, ésta se hace con el control del edificio y comienza una guerra contra los jueces con tal de proteger su imperio. Dredd y Anderson deberán hacer frente a los peligros para salvar su vida.

Director: Pete Travis
Reparto: Karl Urban (Juez Dredd), Lena Headey (Madeline ‘Ma-Ma’ Madrigal), Olivia Thirlby (Cassandra), Domhnall Gleeson, Santi Scinelli (Resyck Man), Deobia Opare (Juez T.J. Alvarez), Jason Cope, Langley Kirkwood (Juez Lexx).

Web Oficial: www.dreddthemovie.com

Trailers de la película:

CRITICA

Héroe a juicio

Algunos han sentenciado la película antes de verla. Se la ha acusado de seguir la estela de la fallida adaptación de 1995 pero estos cargos están totalmente infundados. Poco, o más bien nada, encontramos en el nuevo film de este policía post-apocalíptico de lo que hundió la primera versión. Ya no tenemos como protagonista a un Sylvester Stallone que recibió una más que merecida nominación a los premios Razzie por su terrible mezcla de inexpresividad de “tipo duro” y gritos de mandíbula torcida. En Dredd (2012) Karl Urban da vida al Juez aunque, todo sea dicho, está bastante irreconocible ya que no se quita el casco en todo el film, dejando a la vista tan sólo su marcado mentón. Esto le otorga un aire mítico, misterioso y duro.

Además el compañero de Urban no tiene nada que ver con el graciosillo cargante que interpretó Rob Schneider en el 95. Olivia Thirlby será la mano derecha de Dredd y aportará un contrapunto al héroe de acción siendo una juez novata llena de buenas intenciones y de fe en la humanidad. Una fe que Dredd parece haber perdido tras años de servicio en una Megaciudad post-apocalítica en la que la violencia y el crimen están a la orden del día. Pero el personaje de Thrilby (Cassandra Anderson) también dará juego en otros ámbitos ya que resulta ser una telépata lista para la acción.
Aquellos que busquen en Dredd un gran guion deberán bajar sus expectativas. En realidad es la historia de dos preparados luchadores que pelean encarnizadamente para sobrevivir, o llevarse por delante a todos los que puedan, en un edificio del que no hay escapatoria. Es una premisa sencilla pero que inicia un juego de acción violento y trepidante no apto para claustrofóbicos. No esperéis una acción light para todos los públicos. En Dredd la sangre corre como el agua y sus personajes tienen claro que, si puedes, siempre es mejor despellejar al enemigo o atacarle con un lanzallamas que pegarle unos tiros. ¡Creatividad al poder! Y si se ha de disparar mejor que sea con armas automáticas y que los edificios acaben hechos un queso de gruyer. Podemos decir, pues, que Dredd no se anda con chiquitas en lo que a violencia se refiere y que busca que cada ataque sea impactante y visual.

Precisamente su visualidad es lo que destaca al film, siendo su gran baza en este aspecto la Slo-mo, una droga futurística que hace que parezca que el tiempo pasa a un 1% de su velocidad normal. Resultado: hipnóticas escenas a cámara lenta desde el punto de vista de los drogados en las que la sangre se transforma en hermosas gotitas suspendidas en el aire y los trocitos de cristales rotos brillan como piedras preciosas. Lo cierto es que estas y otras escenas (como las de las impresionantes caídas de algunos desafortunados desde un bloque de 200 plantas) pueden dejar anonadados a muchos, especialmente si van a verlas en 3D, aunque este tampoco es del todo imprescindible.
Dredd es una película de acción que muestra una violencia sin complejos ni tartamudeos y que (¡gracias a Dios!) poco tiene que ver con la versión de Stallone. Sin duda es trepidante, impactante y muy aconsejable para los seguidores del género. Su guion no es ninguna virguería pero al menos no abusa de frases cliché (aunque las tenga) ni de chistes fáciles, como suele suceder en films de este tipo.
Declaramos, pues, inocente a Dredd de los cargos imputados aunque culpable de ser un blockbuster trepidante que parece dispuesto a dejar boquiabiertas a las masas este verano.

Lo mejor: Algunas escenas a cámara lenta, especialmente aquella en la que Dredd y la novata irrumpen en una concurrida sala e imparten “justicia”.
Lo peor: Que le persiga la larga sombra de la pésima adaptación del 95.

Nota: 7

Crítica escrita por: Elena Zafra

3 Comentarios

  1. Si conoces el comic del Juez Dredd no defrauda. Violenta como lo es el comic.

    Efectivamente la historia no pasa de ser un día mas en la vida de Dredd, aunque sea el principio de su "relación" con la futura Juez Anderson de la división Psi.

    Entretenida.

  2. Penoso como remake, le falta argumento le sobra ketchup y los personajes son tan atonos que un shushi tiene mas vitalidad, para los amantes del cine de SciFi un autentico fiasco, aunque la peña de ahora se lo traga todo y lo da por bueno…….

Comments are closed.