Estreno en España: 17 de Febrero de 2012.

Brandon (Michael Fassbender) es un hombre de treinta y tantos años que vive en un confortable apartamento en Nueva York. Para evadirse de la monotonía del trabajo, seduce a las mujeres, en una serie de historias sin futuro y encuentros de una noche. Pero el ritmo metódico y ordenado de su vida se ve alterado por la imprevista llegada de su hermana Sissy (Carey Mulligan), una chica rebelde y problemática. Su presencia explosiva llevará a Brandon a perder el control sobre su propio mundo. ‘Shame’ indaga en la naturaleza profunda de nuestras necesidades, en la forma en que afrontamos nuestra vida y las experiencias que nos marcan.

Director: Steve McQueen
Reparto: Michael Fassbender (Brandon), Carey Mulligan (Sissy), James Badge Dale (David), Nicole Beharie (Marianne), Hannah Ware (Samantha), Alex Manette (Steven), Amy Hargreaves, Elizabeth Masucci.

Web Oficial: www.shamemovie.com

CRITICA

Desgarradora historia de un adicto al sexo

Sexo, esta palabra que para la inmensa mayoría de nosotros es sinónimo de satisfacción, de alegrías, de placer,… es para el personaje al que da vida Michael Fassbender, todo lo contrario. Es tristeza, soledad, amargura,… Nunca el sexo fue tan doloroso como en esta película. No estamos ante una cinta de erotismo, de culto al sexo o cualquier otra cosa que hayamos visto hasta ahora en una pantalla de cine. Nos muestra el sufrimiento de un hombre ante sus impulsos sexuales, esos impulsos que no puede controlar y que lo machacan día a día. Esos impulsos con los que sufre en soledad y que no puede reprimir.

Así nos recrea Steve McQueen lo que puede ser la vida de un adicto al sexo. Y ya en los 10 primeros minutos de la película nos queda marcada en la retina la figura de Brandon (Fassbender) un hombre triste, perturbado por todo lo que pasa a su alrededor, pero satisfecho con su día a día. Todos los días son iguales para él, necesita sexo a todas horas y cualquier mínimo detalle es sinónimo de apetito sexual. Estos primeros minutos los intercala con lo que pasa cada mañana en la vida de Brandon y con una escena tan provocativa como inquietante en un vagón de metro. Ir en metro ya no será lo mismo después de esta escena, creedme.
A partir de estos instantes, los cuales son unos de los mejores inicios que recuerdo en mucho tiempo en una película, McQueen nos va mostrando poco a poco al personaje y todo a su alrededor. La vida en el trabajo, sus fiestas nocturnas y como no, su cada vez más peligrosa y agobiante adicción al sexo. Una adicción que no puede dejar en ningún momento. Es su droga diaria, una droga que le satisface tanto como le perturba día a día. Fassbender borda un papel donde nos muestra el lado más amargo del sexo. El aislamiento interior de un ser que no es capaz de controlar los sentimientos y que rehuye de todo y todos con tal de vivir en solitario y conseguir lo que quiere, inyectarse esa droga que le está matando por dentro y no es otra que el puro acto sexual.

Acompaña a Fassbender en su magnífica interpretación una brillante Carey Mulligan que da vida a la hermana de éste y nos deja también una de las mejores interpretaciones de su carrera. Su New York, New York en plano fijo, te deja pensativo, melancólico al oírla cantar con voz pausada en ese pub neoyorkino y donde los primeros planos que nos muestra McQueen del personaje hace que sepamos que Mulligan lleva sufriendo tiempo y ya no puede más.
Muy bien llevada la dirección que aparte de las dos escenas citadas, McQueen nos deleita con unos planos secuencias espectaculares. Uno de ellos es pura poesía interpretativa. Cámara plantada detrás del sofá. Fassbender viendo la televisión. Mulligan llega y se sienta al lado de él. Y a partir de aquí nos seduce con un plano fijo digno de enmarcar. Aquí nos demuestran estos dos actorazos de lo que son capaces, que durante varios minutos van pasando de la alegría a los reproches.
Y de escenas visualmente magistrales se sirve esta película, gracias sobre todo a la genial dirección de McQueen y a las dotes interpretativas de sus dos actores principales. Todo ello acompañado de una música perfecta para cada plano secuencia con los que el director hace que gocemos una y otra vez. No me cansaría de verlos porque hay varios y muy buenos. Para todos los gustos y colores. Otro de lo más originales y que hace que nos olvidemos del sufrimiento del personaje de Brandon durante unos minutos es cuando sale a correr por las calles nocturnas de New York. Sale de casa, se pone los cascos y de repente escuchamos la música de Glenn Gould y su piano con la partitura de J.S Bach Prelude No. 10 In E Minor, bwv 855. Empieza a correr y entramos en una tranquilidad que hace que nos olvidemos de todo el dolor, furia, rencor y arrepentimiento que el personaje acaba de tener hace unos minutos. Simplemente magistral.
Shame es una película dura, que va desnudando a sus personajes dejándonos ver sus amarguras y que te perturba psicológicamente según avanza el film. Te revuelve en la butaca, te hace sentir incómodo ante lo que estas viendo. Es un fascinante y doloroso viaje al lado oscuro del sexo, donde lo que menos importan son los sentimientos. Y cuando verdaderamente llegan a importar, la furia y el miedo afloran en estos personajes tan bien matizados, gracias sobre todo a la magnífica dirección de Steve McQueen. Una película sobre sexo que hace que no nos sintamos a gusto con lo que estamos viendo. Increíble pero cierto.

Lo mejor: Las interpretaciones de los protagonistas.
Lo peor: Un final algo precipitado.

Nota: 8,5

Crítica escrita por: Luis Miguel Domínguez

2 Comentarios

  1. La acabo de ver. Grandiosa, fascinante, enigmática y como dices desgarradora y perturbadora. Enhorabuena por la crítica. Bestial esa escena del sofá y cuando sale hacer footing. Es tal como lo describes aquí, que se pone los cascos del ipod y haces que se te olvide todo jejejejeje.
    Buenísima crítica y buenísima web, me encanta estar al día de todo los tráilers y críticas que ponéis, me ayudáis mucho.
    Saludos

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