Estreno en España: 30 de Septiembre de 2011.

En esta nueva entrega, el espía más insólito del servicio secreto de Su Majestad deberá detener a un grupo de asesinos internacionales antes de que eliminen a un líder mundial y abran la puerta al caos global. Durante su desaparición de la faz de la tierra, el mejor espía del MI7 ha estado puliendo sus increíbles habilidades en una lejana región de Oriente. Pero cuando sus jefes se enteran de que alguien planea atentar contra la vida del primer ministro chino, no les queda más remedio que encontrar al poco ortodoxo agente. El mundo le necesita y Johnny English vuelve a la carga. Ahora tiene la posibilidad de redimirse, y deberá hacer uso de lo ultimo en tecnología punta para desenredar una complicada conspiración que implica al KGB, a la CIA e incluso al MI7. Faltan pocos días para que dé comienzo la conferencia estatal y un hombre deberá usar todos sus trucos para protegernos a todos. En la mente de Johnny English, el desastre puede ser una opción, pero el fracaso, jamás.

Director: Oliver Parker
Reparto: Rowan Atkinson (Johnny English), Pierce Brosnan (Ambrose), Gillian Anderson (MI7 Agente Pamela Head), Dominic West, Rosamund Pike, Daniel Kaluuya, Burn Gorman (Slater), Ben Miller (Bough), Togo Igawa (Ting Wang), Mark Ivanir (Karlenko), Christina Chong (Barbara), Joséphine de La Baume (Madeleine).

Web Oficial en español: www.johnnyenglish.es
Web Oficial: www.johnnyenglishreborn.com

CRITICA

Humor y acción para salvar el mundo

Johnny English vuelve a nuestras pantallas 8 años después de su primera aventura, con un fracaso como agente secreto a sus espaldas pero con una nueva misión al más puro estilo 007 bajo el brazo. Y lo hace con una mezcla de acción y humor en la que la primera está a la altura, muy bien llevada y se nota algo más elaborada que la parte cómica, la cual adolece de falta de creatividad en algunos momentos. Cuenta con unos gags bastante buenos (el de la silla sin ir más lejos) y tiene un comienzo muy prometedor, pero en no pocas ocasiones, las bromas son demasiado simples y faltas de la gracia propia de una cinta como ésta.

El espectador que disfrute con este tipo de comedias se lo pasará bien en su mayor parte, pero es probable que se le quede una media sonrisa cuando lo que se esperaba era la carcajada completa. Y la película apunta alto en su comienzo en este aspecto, tanto en su genial apertura como con la vuelta de English al trabajo, donde detalles como la compra de los servicios secretos por parte de una gran compañía privada promete buenos momentos humorísticos y, sin embargo, al final parecen un poco desaprovechados. Un acierto en cambio es el uso de todos los inventos tipo James Bond, ya que es cuando se centra en utilizar los clichés del universo Bond, cuando mejor funciona la cinta.
La película cuenta con un estupendo reparto, empezando por una fabulosa Gillian Anderson como nueva jefa del MI7, una dulce y graciosa Rosemunde Pike y un encantador y simpático Dominic West, a los que se nota a gusto y comprometidos con sus papeles. Mención aparte merece el carismático Rowan Atkinson, comodísimo en su papel como no podía ser de otra manera, con una interpretación en la que hace gala de una actitud de superioridad, sobre todo frente a su joven ayudante el agente Tucker (interpretado por Daniel Kaluuya y uno de los mayores aciertos del film), para finalmente acabar haciendo siempre el ridículo. Y son sus escenas juntos los que salvan en más de una ocasión los momentos de humor más descafeinados. Y lo mismo con el resto de interpretaciones, que ayudan a mantener un guión, firmado por Hamish McColl, un tanto irregular, con momentos que se hacen algo aburridos y alargados, además de repetitivos, aunque la película levanta bastante el vuelo en su parte final y nos da un cierre verdaderamente divertido cuando se descubre toda la trama que rodea la misión del agente secreto.

Por tanto, en una película de estas características nos encontraremos prácticamente todo lo esperado: humor y payasadas al más puro estilo Rowan Atkinson, buenas escenas de acción y unas localizaciones dignas de las cintas de James Bond que le sientan muy bien a todo el conjunto, pero le falta mucho para lograr su objetivo de mantener al espectador muerto de la risa durante todo el metraje.
Johnny English es un ameno entretenimiento con el que se pasa un buen rato, recomendable para aquellos que disfruten con los gags de Rowan Atkinson, a pesar de esos momentos de humor irregulares que le restan calidad a la propuesta. Un producto de fácil visionado que podría haber sido más redondo con una mayor dosis de ingenio y chispa en algunas ocasiones.

Lo mejor: Todo el reparto.
Lo peor: Muchos momentos de humor que no provocan risa.

Nota: 5,5

Crítica escrita por: Bea Varela

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