Estreno en España: 20 de Enero de 2012.

Matt King (George Clooney), casado y padre de dos niñas, se ve obligado a reconsiderar su pasado y a encauzar su futuro cuando su mujer sufre un terrible accidente de barco en Waikiki. Matt intenta torpemente recomponer la relación con sus hijas –la precoz Scottie, de 10 años (Amara Miller), y la rebelde Alexandra, de 17 (Shailene Woodley)–, al mismo tiempo que se enfrenta a la difícil decisión de vender las tierras de la familia. Herencia de la unión entre la realeza hawaiana y los misioneros, los King poseen algunas de las últimas zonas vírgenes de playa tropical de las islas, de un valor incalculable.

Director: Alexander Payne
Reparto: George Clooney (Matt King), Matthew Lillard (Brian), Judy Greer, Matthew Lillard, Beau Bridges, Shailene Woodley (Alexandra), Robert Forster, Michael Ontkean, Sonya Balmores, Rob Huebel (Mark Mitchell), Mary Birdsong (Kai), Milt Kogan (Doctor Johnston), Nick Krause (Sid).

Web Oficial en español: www.losdescendientes.es
Web Oficial: www.foxsearchlight.com/thedescendants

CRITICA

El paraíso resquebrajado de George Clooney

Tras ocho años sin realizar un largometraje Alexander Payne vuelve a la dirección y lo hace, en esta ocasión, contando con un grupo de actores en estado de gracia (sobre todo el trío principal) interpretando a unos personajes que viven en una Hawái que el director intenta mostrar diferente a la de la postal turística, con una luz que languidece entre sus impresionantes paisajes, entre el mar y la montaña, como lo hace la propia vida que pisa sus ancestrales tierras. Pero es una luz que vuelve a salir, al fin y al cabo, que resurge cada día nuevamente como lo intentan también las relaciones dañadas que se nos muestran en pantalla, las de una familia que lucha por encontrar hueco para la comprensión y el perdón y dar así el siguiente paso.

La historia no deja de ser convencional, pero hay que tener en cuenta que delante tenemos a un director que se enorgullece de hablar de personajes reales con problemas que el espectador es capaz de identificar y, a su vez, los inunda de sentimientos tan universales como la culpa, el perdón, la ira, la esperanza o el arrepentimiento. La pareja (otro tema recurrente en el cine de Payne) y las relaciones paterno-filiales, son tratadas con bastante naturalidad, sin añadir más dramatismo del necesario sino más bien incluyendo toques de humor que consiguen rebajar el tono trágico al conjunto y que logran que no termine siendo un relato lacrimógeno al uso y sí una historia bien contada que sabe guiarse bien entre el drama y la comedia.
Los personajes de la película están inmersos en una profunda crisis, con varios frentes abiertos, y el padre no es el único que sufre las consecuencias del duro golpe que ha recibido la familia. Sus dos hijas, de 10 y 17 años, muestran un comportamiento propio de aquellos que, de repente, deben enfrentarse a un dolor que no saben manejar.

En el caso de la hija mayor, interpretada por una deslumbrante Shailene Woodley (de lo mejor de la cinta y cuya química con George Clooney es absoluta), además ha de lidiar con los sentimientos contradictorios que le produce su relación con su madre y que se ve reflejado en una conducta con la que intenta rozar el límite (el suyo y el de su padre) pero que también la lleva a un realista proceso de maduración que la ayuda, además, a acercarse a su progenitor. Esto no es mostrado por el director con sensacionalismo sino que está ahí, se deja entrever y el espectador simplemente lo capta. Payne dirige de manera fina y sutil y toca la tragedia sin convertirla en algo insoportable, apoyado en un sólido guión que él mismo coescribe, adaptando la novela homónima de Kaui Hart Hemmings.
La misma finura que se aprecia en la dirección es la que podemos observar en la interpretación de George Clooney, que da lo mejor de sí mismo en los momentos en los que el dolor de su personaje alcanza las cotas más elevadas, y son sus ojos y movimientos los que nos indican lo que el protagonista está sintiendo. Sin duda, sus intentos por restablecer el orden en su vida (que parecen marcados por el tic-tac del corazón de su esposa) y la dinámica tan natural y creíble que establece con sus hijas son algunas de las cosas más interesantes de toda la película.
Los Descendientes es una competente cinta, de ritmo pausado y escenario melancólico, que observa y retrata con humanidad a sus complejos personajes, quienes muestran emociones lógicas y coherentes ante el devenir de la vida y que serpentea a través de nuestras dañadas existencias para mostrarnos las luces que nos ayudarán a seguir adelante.

Lo mejor: George Clooney y Shailene Woodley.
Lo peor: La conversación de madrugada entre Clooney y el amigo de la hija resulta un poco artificial.
Nota: 7,5

Crítica escrita por: Bea Varela

5 Comentarios

  1. Es la peor pelicula por la cual he pagado nunca. No pasa absolutamente nada interesante en todo el largometraje, es una estafa.

  2. Considero que Cloney está consagrado ya y por lo tanto otra actuación soberbia, pero no me parece un film para triunfar en los Oscars

  3. A mi me ha parecido un telefilm de domingo por la tarde con un aderezo, importante eso si, de dos buenísimos actores (mas la hija mayor que Clooney)y mejores recursos de producción. Y con algunos momentos acertados, que producen una reflexión partiendo de un mero planteamiento estético basado en contraponer el dolor con el humor.
    Salvo esas matizaciones, me parece una película correcta, pero nada mas

  4. Entre el drama y la comedia estan expendidos los actores. La unica pega es no haberla visto en pantalla grande

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