CRITICA – ‘Intocable’: Reír ante la adversidad

Historia emotiva e ingeniosa, basada en hechos reales, sobre dos hombres que nunca deberían haberse encontrado: un aristócrata herido en un accidente y un joven de los suburbios de París quien se convierte en su asistente y le devuelve las ganas de vivir.

Director: Olivier Nakache y Eric Toledano.
Reparto: François Cluzet (Philippe), Omar Sy (Driss), Audrey Fleurot (Magalie), Anne Le Ny (Yvonne), Audrey Fleurot (Magalie), Clotilde Mollet (Marcelle), Alba Gaïa Kraghede Bellugi (Elisa), Cyril Mendy (Adama), Christian Ameri (Albert), Grégoire Oestermann (Antoine).

· Ficha de la película

Trailer 1 (español) Trailer final (español)

No es nada común que un tetrapléjico sea el protagonista de una comedia. Lo más sencillo sería caer en el dramatismo sentimentaloide fácil o en la banalización de la situación, pero Intocable no llega a ninguno de esos extremos y es capaz de encontrar un equilibrio perfecto que le permite hacernos disfrutar de un humor inteligente sin olvidar la trágica situación de su personaje principal.

Intocable nos hace reír y nos emociona porque es tierna, divertida y creíble. Se basa en la historia real de un tetrapléjico multimillonario que contrató, para que le cuidara, a alguien que no parecía el candidato más idóneo, un hombre de los suburbios parisinos con antecedentes penales. Pero, inesperadamente, entre ellos se creo un vínculo muy fuerte que acabaría cambiando la vida de ambos.
Esta relación simbiótica se ve muy bien reflejada en la película. François Clozet y Omar Sy son capaces de transmitir al espectador como, lentamente, se va creando esa conexión entre los personajes. Ambos demuestran sus capacidades interpretativas. Sy ilumina la pantalla con su sonrisa y provoca carcajadas por doquier. Clozet, aunque se está limitado porque tan sólo puede expresarse con la cara ya que su personaje está postrado en una silla de ruedas, deja boquiabierto al espectador con su matizado, sereno y genial trabajo.

El dueto protagonista es el que da fuerza y entidad al relato pero los secundarios están más que correctos en su papel y salpimentan esta comedia capaz de deleitar tanto a los paladares más exquisitos como al gran público. Es un film eminentemente positivo que insta a superar todos los obstáculos, por difícil que parezca, y que demuestra que la amistad no entiende de razas ni de clases sociales, todo ello sin ser excesivamente edulcorada y manteniendo la frescura.
Si tuviera que poner alguna pega a la película sería que el ritmo se ralentiza en algunos momentos y que es un poco irregular, pero no llega a hacerse pesada. Intocable nos obsequia con un humor blanco aunque el personaje de Omar Sy se encarga de romper con lo políticamente correcto y de ofrecer un punto de vista inocente pero algo gamberro.
Intocable no profundiza en el drama subyacente de la tetraplejia, pero ése no es el objetivo del film. Lo que pretende es demostrar que, por muchas adversidades que se nos presenten, siempre es posible encontrar la felicidad, aunque para ello necesitemos esforzarnos al máximo y contar con una mano amiga.

Lo mejor: La química entre los protagonistas.
Lo peor: Alguna escena que se alarga demasiado.