Estreno en España: 21 de Diciembre de 2012.
Director: Oriol Paulo
Reparto: José Coronado, Belén Rueda, Hugo Silva, Aura Garrido, Juan Pablo Shuk, Cristina Plazas, Oriol Vila, Pere Brasó, Patricia Bargalló, Montse Guallar, Mia Esteve.
Web Oficial: www.elcuerpo-lapelicula.com
El entretenidísimo caso del cuerpo desaparecido
Un cine español que quiere competir en las grandes ligas internacionales, exportando un estilo que ha encontrado su hueco en el mercado mundial y donde hay que destacar el esfuerzo de productores, directores, guionistas y un largo etcétera de profesionales, por querer contar también nuestras historias más allá del territorio nacional. Y esta generación de jóvenes cineastas merece un reconocimiento, al menos por parte de quien escribe estas líneas. Pero dejando a un lado este pequeño análisis, la película de Oriol Paulo (que también es autor del guion) se puede considerar una cinta de suspense bastante decente, que peca de tramposa en algunos momentos y que usa sus recursos con más acierto en algunas ocasiones que en otras. Sin embargo, durante dos horas te mantiene pegado a la butaca, no aburre ni siquiera durante un segundo (solo por eso ya merece el aprobado) y su tramo final realmente consigue lo que se propone, que dudemos de todo y que nos resulte inesperado. Y si esto ocurre, es que la narración ha conseguido su objetivo, que nos metamos de lleno en la trama y nos planteemos una serie de preguntas, aunque las respuestas no siempre sean satisfactorias. Concebida como una obra de misterio que bebe de muchas (y manifiestas) fuentes, también quiere mostrar su admiración al maestro de todos los maestros del suspense, Alfred Hitchcock (una de las escenas es un homenaje confeso a Sospecha) y a un género muy explotado y demasiado manido como para que nos sorprenda a estas alturas. Pero lo intenta y para ello, nos ofrece varios giros de guion repentinos y una recta final totalmente inesperada que satisfará en función de cada cual.
La película, ganadora del premio del Jurado en el Festival Internacional de Cine Fantástico de París y que también inauguró el pasado Sitges, juega a engañar al espectador dando unos toques de terror sobrenatural y así es que durante casi todo su metraje no sabemos lo que está ocurriendo con ese cuerpo desaparecido. La trama gira en torno a los tres personajes afectados por su desaparición y al de la dueña del mismo, una Belén Rueda que da una vuelta de tuerca con respecto a sus personajes anteriores y se nos presenta aquí como mujer fatal y manipuladora haciéndola, además, bastante verosímil. José Coronado es, en este caso, el inspector de policía cansado de la vida y afectado por muchos fantasmas del pasado. Se ha criticado mucho la caracterización del actor (ese pelo…), sin embargo, teniendo en cuenta la personalidad y circunstancias del hombre al que da vida, resulta bastante acertada. Es un individuo totalmente despreocupado de su aspecto, apático, envejecido, otra representación tampoco habría tenido sentido. Los actores jóvenes también están a la altura, destacando un Hugo Silva, con un papel que le lleva de verdugo a víctima y de víctima a verdugo constantemente. La puesta en escena está muy conseguida, gracias en parte al buen trabajo de fotografía obra de Óscar Faura, quien ha colaborado recientemente con Bayona en Lo Imposible. Un ambiente frío, nocturno, lluvioso (eso sí, en más de una ocasión dan ganas de meterse en la película y darles un par de paraguas), perfecto para pasar una noche de miedo entre las cuatro paredes del Instituto Anatómico Forense. Una atmósfera gris y heladora, que acompaña muy bien al carácter de los personajes, todos ellos atormentados por algo. El argumento está marcado por la incertidumbre de no saber en ningún momento qué ha ocurrido con ese cuerpo y donde los sospechosos, las nuevas pistas y los motivos de cada cual no dejan de surgir. La película tiene sus fallos, por supuesto, cuenta con algunas escenas que quieren ser impactantes pero que no funcionan (la que tiene como protagonista en el servicio a Hugo Silva y un papel, sin ir más lejos, que resulta bastante absurda e innecesaria) y en su guion se pueden encontrar agujeros y algunos cabos sin atar y un final que, aunque sorprenderá a casi todos, resulta difícil de tragar y que habría que ver una segunda vez para comprobar si realmente encaja tanto en la trama como nos quieren hacer creer. Pero con todo y con esto, la película se las arregla para armar un conjunto realmente entretenido y placentero.
El cuerpo es una película de misterio con tintes de thriller psicológico y sobrenatural que consigue su objetivo más básico, captar nuestra atención y sorprendernos con algunos giros inesperados. Engañosa sí, inverosímil a veces, también, pero al fin y al cabo es un producto de ficción que busca que el espectador pase un buen rato mientras intenta averiguar qué, cómo y porqué. Si entras en este juego de dos horas que pasan en un suspiro, la cinta habrá cumplido su meta más elemental, entretener.
Lo mejor: Tiene un ritmo que no decae en ningún momento.
Lo peor: Algunas escenas resultan muy forzadas.
Nota: 6
Crítica escrita por: Bea Varela